Dentro de la serie de actividades para gestionar las emociones negativas y mejorar tu estado emocional en general, seguimos en esta cuarta entrega hablando de la importancia de los alimentos que tomamos.
Cuando se habla de gestionar adecuadamente las emociones no siempre se tiene en cuenta la íntima relación entre la comida que ingerimos y el estado emocional.
Seguro que te has dado cuenta de que cuando te sientes un poco desanimado aumenta tu deseo de comer dulce, es como si ello te proporcionara cierto consuelo. O que si comes sintiéndote irritado o muy nervioso, tienes una digestión pesada. De la misma manera que nuestras emociones pueden afectar al sistema digestivo, también ocurre lo contrario, porque existe una relación bidireccional entre el cerebro, el tubo digestivo y la biota intestinal.
Siempre se ha dicho que «somos lo que comemos», pero yo diría aún más «pensamos y sentimos como comemos».
Este vídeo forma parte de los recursos online del capítulo 13 del libro «La cara positiva de las emociones negativas» de Isabel Sales http://www.isabelsales.com Un libro recomendado por grandes formadores y escritores como: Brian Tracy, Javier Iriondo, Jürgen Klaric y David Montalvo. Con prólogo de Juanma Quelle.
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Un libro que te da herramientas para reducir la ansiedad y el sentimiento de culpa por tener emociones negativas y te enseña a sacarles un partido práctico y positivo para vivir mejor. Te ayuda a conocerte más, a no temer a las emociones negativas y te ofrece recursos para gestionarlas positivamente.
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