Una de las frases que más escuchamos decir, tanto a los demás como a nosotros mismos, es: “no tengo tiempo”.
Y aunque el tiempo es un concepto universal y todos tenemos 24 horas al día, lo cierto es que cada persona percibe el tiempo de manera diferente.
No hay ningún misterio en ello, simplemente es una cuestión de prioridades.
Y es que realmente no podemos “gestionar el tiempo” porque el tiempo es el que es, sino que podemos gestionarnos a nosotros mismos en el uso que hacemos del tiempo, y la mejor manera es organizar nuestro día en función de nuestras prioridades.
Aquí van 10 claves para organizar tu tiempo de manera efectiva:
- Identifica tu manera de organizarte.
- Planifica.
- Evalúa.
- Prioriza.
- Actúa
- Sigue tu progreso.
- Elimina las distracciones.
- Elige un método de trabajo.
- Establece una rutina ganadora.
- Cuida tu cuerpo y tu mente.
Contenido
1.- IDENTIFICA TU MANERA DE ORGANIZARTE.
¿Cómo te organizas habitualmente?
¿Priorizas ateniéndote a tus objetivos?
¿Cómo organizas tu agenda?
¿Sueles posponer las acciones o te gusta tenerlo todo previsto desde el inicio?
Si eres de las personas que suelen posponer las decisiones y/o las acciones, trabajarás más fácilmente bajo presión y con herramientas reactivas y adaptables.
Si eres de las personas muy organizadas apreciarás las herramientas de planificación para optimizar tu tiempo.
Sea cual sea tu perfil, debes tener claro que son 3 los pilares para que tu tiempo se organice eficazmente: la planificación, la evaluación y la priorización.
2.- PLANIFICA.
Planificar no consiste en evaluar o priorizar sino en anotar tus objetivos, tus metas, tus ambiciones, con plazos claros y precisos. Prepara un diario con plazos que irás cumpliendo poco a poco.
La planificación es un paso esencial en la gestión de tu tiempo ya que te brinda una herramienta para visualizar tus plazos, disponibilidad e indisponibilidad. Para lograr tu éxito establecerás planes de acción con hitos o pasos importantes.
3.- EVALÚA
Evaluar es el segundo paso, en el que identificas el tiempo y los recursos necesarios para lograr tus objetivos.
A menudo es un paso aparentemente estático aunque debe ser parte de la proactividad. Se trata de hacer un balance de tus ambiciones y de tus aspiraciones para encontrar las palancas adecuadas que activar.
4.- PRIORIZA
Priorizar es el paso final que, dependiendo de tu situación, te invita a construir tu éxito paso a paso en una dirección u otra. Realistas pero ambiciosos, tus objetivos deben acompañarte en tu vida diaria y ajustarse si es necesario.
¿Quieres aumentar tus posibilidades de alcanzar tus objetivos? Desarrolla una hoja de ruta eficaz. Para ello debes pensar en tus objetivos todos los días, deben ser una parte integral de tu rutina diaria desde que te levantas hasta que te acuestas.
Es importante visualizar tu éxito. Al escribir regularmente tus objetivos a media, corto, mediano y largo plazo, tienes el poder de transformar tus escritos en acciones concretas. Tus prioridades deben dictar tus decisiones y comportamiento.
5.- ACTÚA.
Sigue tu hoja de ruta realizando las acciones diarias.Una vez a la semana, haz un balance de lo que has hecho, de lo que tienes pendiente y de lo que hay que hacer en el futuro.Esta distribución te permite priorizar tus tareas y acciones diarias integrándolas en tu rutina. Ya sea en una hoja de papel, en una libreta dedicada a ello, en tu computadora o en tu celular, ten siempre a mano esta hoja de ruta para visualizar tus objetivos y mantener el rumbo.
El poder del hábito y la rutina es ser un elemento transformador de tu éxito hacia el éxito total.
6.- SIGUE TU PROGRESO.
Realiza un seguimiento de tu progreso con una herramienta de seguimiento diario y realiza los ajustes necesarios cuando sea necesario.
Este seguimiento puede realizarse a través de etapas formales o informales.Podría ser una lista del día en tu teléfono en la que puede marcar los logros a medida que avanzas.También puede ser un momento de reflexión e introspección durante el cual cuestionas tu desarrollo personal o profesional.
Gracias a estos momentos podrás tomar las decisiones correctas para administrar mejor tu tiempo con el fin de lograr tus objetivos.
7.- ELIMINA LAS DISTRACCIONES.
El mayor enemigo de tu tiempo son las distracciones de todo tipo. En tu organización debes tenerlos en cuenta tanto como un posible obstáculo como también como fuente de relajación.
No puedes pasar todo tu tiempo trabajando y necesitas entretenerte, ya sea con conversaciones telefónicas o consultando las redes sociales. Para organizar eficazmente tu tiempo debes organizar sesiones dedicadas al trabajo, otras a la relajación y otras a todos los demás tipos de ocupaciones.
Altérnalos durante el mismo día para garantizar el equilibrio y un alto nivel de concentración en lo que emprenderás. Planifica en las listas de cosas para hacer también las distracciones voluntarias.
8.- ELIGE UN MÉTODO DE TRABAJO.
Ya sea para mejorar tu productividad, ahorrar tiempo u organizarte mejor, debes utilizar el método de trabajo adecuado.
Estos son algunos métodos comprobados para administrar mejor el tiempo:
- El método Post-It: consiste en reducir tu lista de tareas pendientes centrándote en determinados aspectos prioritarios. Esta es una buena forma de priorizar y darle importancia a determinadas tareas, ya sea por su inminente fecha límite o por sus importantes requisitos.
- El método Pomodoro: inventado por Francesco Cirillo, este método consiste en darse 30 minutos de tiempo para avanzar en un proyecto. Después de 25 minutos de máxima concentración (usa un cronómetro), tómate un descanso de 5 minutos y así sucesivamente a lo largo del día. Se recomienda realizar al menos 4 ciclos durante el día. ¡Ideal para aumentar tu productividad en poco tiempo!
- El método Deep Work: este término inglés designa una realidad fácil de entender, que muchas veces es necesario un trabajo profundo para entregar y lograr cosas. Siguiendo el mismo espíritu que el método Pomodoro, el trabajo profundo consiste en establecer periodos de trabajo en los que la concentración debe ser al máximo con el objetivo de ultimar algo que, por ejemplo, lleva mucho tiempo pendiente.
Estos 3 métodos pueden ser complementarios o utilizados individualmente, la clave está en conocer y adaptar tu psicología para mejorar tu productividad.
9.- ESTABLECE UNA RUTINA GANADORA.
Todo campeón tiene una rutina que nunca abandona. Si hay un lugar donde siempre tendrás el control es tu propia vida. Nadie lo experimentará por ti. Eres la única persona que puede influir en lo negativo de tu vida y transformarlo en algo positivo. Esto requiere tener confianza en uno mismo y conocer sus objetivos de vida.
¿Qué tienen en común estos líderes o personalidades que admiras y que viven la vida de sus sueños? La consistencia.
La constancia implica crear una rutina eficaz: estilo de vida, aprendizaje, desarrollo personal, etc.La rutina ganadora te pone en el camino hacia el éxito.
10.- CUIDA TU CUERPO Y TU MENTE.
Si llevas un buen ritmo de vida podrás aumentar tu nivel de energía de forma sostenible. Este ritmo de vida involucra varios aspectos, entre ellos el sueño, la alimentación y la actividad física.
El sueño es una de las principales fuentes de energía física. El deporte es una excelente manera de eliminar las toxinas malas, libera endorfinas, que crean una sensación de bienestar. Es perfecto para darte un impulso de energía.
No se trata sólo de cuidar tu salud física sino también tu salud mental. Esto pasa por tu capacidad de tomar descansos para recargar tus baterías. Hay que saber despejar la mente y dar un paso atrás para mantenerse comprometido y motivado.
Cuidándote y preservándote ganarás energía y podrás transformarla en proactividad y fuente de éxito. Cuidarte te permitirá cuidar tu tiempo.
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Muy bueno el documento muchas gracias Isabel